viernes, marzo 10, 2006

Flash social

Querido Gonzalo,

Ahora me dicen que te fuiste al Malba, a encontrarte con tu pen-pal Oliverio, el prolífico novelista. Yo, como te imaginarás, casi no abandono mi escritorio. ¿Qué clase de vida es ésta? Mi secretaria privada me dejó con el balance a medio hacer, aduciendo no sé qué invitación al remoto Brasil (¡un tour arquitectónico para conocer el sueño de urbanización federalista de Juscelino El Rojo!); y Sebastián Ernesto sigue en las termas de Daimán, viendo si la fangoterapia funciona también para curar el sarcasmo... En fin, contame –si querés– un poco acerca de esa presentación. Contame sobre tus relaciones públicas, sobre el mundo exterior. Saludos,

JM

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[2 am, ni llueve]
Uf, es que no me lo vas a creer. Fuimos ayer, con Valeria, al Malba. Era la presentación de la novela "Promesas naturales" de Oliverio Coelho (cuarta novela, o decimocuarta, no oí bien) [Editorial Norma]. Qué decir, es como que sentíamos tener un millón de amigos; entre Axel Krygier, Cristián Constantini, Martín Kohan, Carlos Gamerro, el mismo Oliverio, todo era amor.
En fin, cronología:
Llegamos a tiempo, mientras las puertas permanecían cerradas, para comer un tostado con un café con leche tardío, haciendo cuenta regresiva porque teníamos que asistir, también, a la presentación de Acuanauta, de Melero, en un muy otro lugar, casi al mismo tiempo. Pero la literatura es más fuerte, y permaneceríamos.
En el majestuoso auditorio, nos sentamos contra un pasillo, a media altura, y presenciamos un espectáculo multidimensional. Subieron Analia Couceyro y el extraordinario pianista Krygier. A un costado de la mesa reservada para los conferenciantes, había una silla que ocupó la lectora-actriz, y silla y teclado para el músico. Enseguida advertimos, que, además del keyboard, axel se concentraba sobre un pad-sampler (no sé nada de instrumentos electrónicos) que frotaba y percutía, manipulando todos los sonidos, incluyendo la voz de Analía. Ella leía, incólume, y cada tanto lo miraba, y axel, por ejemplo, pulsaba y repetía “Chatrán”, el nombre del protagonista de la novela (creo), que ella acababa de pronunciar. La novela, sumamente lúdica, se prestaba al juego, y Axel secundaba con melodías y pequeños valcesitos balcánicos la perfecta dicción y los caprichosos énfasis de la lectora. Veinte minutos de esto pasaron en un suspiro (podrían haber seguido con toda la novela), y dio lugar a la presentación formal.
Oliverio, flanqueado por Gustavo Ferreyra y Juan Becerra, en clásico tridente, resolvieron todo en otros veinte minutos. ¿Pretendes, Juan, que te resuma las ponencias de los adláteres del autor? Hubiéramos enviado un periodista, y un taquígrafo, y un criptógrafo. Bellas fintas, digamos, en torno a la obra; inteligentes, indiscernibles. De haber leído el libro, estaríamos en desacuerdo o concordaríamos; por ahora aplaudimos. Oliverio agradeció ceremoniosamente, remató con simpatía y ya. Una perfecta presentación, con claros rasgos avant-garde; todos contentos. Cambiamos figuritas con el artista, y corrimos a lo de Melero.

{Aparte: cuando nos despedíamos, no entendí lo que me dijo Oliverio con respecto a éste, nuestro hermoso blog. Cinco segundos después, alejándonos, me di cuenta que él pensaba que vos y yo somos la misma persona. Que yo posteo y yo, con otro nickname, comento. Eso explicaría la acusación de esquizofrénico de el otro día por parte de un anonimous. Pero eso no es así, ¿nocierto? Vos sos un ser humano, Juan N., un editor inconmensurable, y un blogger-master perfecto. “Yo es Otro”, “Yo es Otro”.
Supongo que de nada servirá que tú me digas que no he perdido la razón.}

Ahora, a descansar,
gzal

19 comentarios:

Anónimo dijo...

Lamentablemente soy protagonista secundario... Pero espero que Coelho me haga títere en otra de sus novelas.

oliverio coelho dijo...

- Ni loco, Chatran. La próxima vas al hospicio de Las mercedes.
- Gonzalo, todavía no logro entender quién es quién. Es un blog polifónico...? Cuando empecé a leer blogs me pasaba eso: pensaba que cada blog estaba hecho por miles de personas, por miles de hormiguitas obreras... Se ve que en la presentación se me desajustó algún tornillo, sigo "ido". Fabuloso trueque. Pronto empiezo la lectura.

Loli dijo...

Oiga Gonzalo, qué largo es esto!

Diga la verdad, vale la pena que lo lea?

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con Loli, creo que avancé tres líneas y me atrapó una sensación de desasosiego difícil de superar ¿era así? ¿se buscaba esto? En cambio, la pequeña historieta de Nadalini por el evento de Quequén era atinada ¿será que hay que faltar a los eventos para hacer buenas crónicas?

Loli dijo...

fotos?
las de los autores?

Loli dijo...

Ah, qué acertado, gzal!

podremos poner en alguna de esas fotos, por ejemplo, a una mujer vestida de empleada doméstica, con una badeja de plata, parada ahí en segundo plano?

genial.

Igual sepa, yo ya monté una producción fotográfica en mi blog en la que aparecía un título de entropía.

Loli dijo...

Adjunto enlace: http://sepanentender.blogspot.com/2005/11/depende-la-hora-y-el-nimo.html

Anónimo dijo...

Podés tutearme, Gonz, soy una purreta. Y sí, seguro que si la crónica hablaba de mí la leía con gusto... aunque, sin ser desagradable, siempre es más atractivo el ambiente de la playa con sus surfers, sus bikinis y tragos frutales, que el techado y tristísimo Malba ¿no le parece?

Loli dijo...

eso! más títulos (a los que previamente les pintaremos el lomo de los más diversos colores para que parezca más variado).

Puede estar usted también, con JM, ambos fumando en pipa.

Anónimo dijo...

Ahora sí, ya lo leí, Gonz. Me parece bastante más entretenido que otros relatos, pero me perturbó un poco pensar que usted es el mismo señor que Nadalini, a quien conozco y me cae muy bien, por otra parte. Por favor, si son puras chácharas, no las largue a rodar así como así, que estoy paranoica. La crónica: más de Ñ que de Cancela.

Apostillas dijo...

Todos ustedes perdieron el buen juicio.

Anónimo dijo...

¿Y usted quién es? ¿el señor Blog? Como el señor televisor de Flavia Palmiero.

Anónimo dijo...

Yo también estoy leyendo Antuca. Voy por la pàgina 70.

Anónimo dijo...

Tómelo como quiera, Gonz, una letra extraña que está al pedo.

Anónimo dijo...

Ah, otra cosa: si quiere recuperarse de la ausencia quequenense, véngase hoy al cumpleaños de Marina Serrano ¿se anima? Si está por ahí, dígalo.

Anónimo dijo...

y CRISTOPO??

Anónimo dijo...

Terminan fantásticamente, y empiezan con vino mendocino y empanadas caseras. Usted se lo pierde, y se lo pierde Cristopo, y Olco, y todo aquel que no desee acompañarnos.
Usted es un desatinado.

Anónimo dijo...

No, Gonz, su vaticinio falló. Terminaron todos a los besos. Recuerde que la editorial que auspicia estas festicholas se llama "Sigamos enamoradas". En la fiesta hubo mucho baile, mucho vino, mucha conversación amistosa y también mucho amor. Se la perdió.

cristopo dijo...

"Lo que importa es la literatura, los libros van y vienen".
"Lo que importa es el amor, los enamorados van y vienen".
"Lo que importa son los panqueques, los quequenes van y vienen".
¿noquis con tuco o polenta con antuca? tuca tucán tucanero, hoy me vendieron falopa vencida y un libro de Georg Trakl.
Un saludo a todos los que me desconocen, y a entropía que me mató mi gorrión que pía en la
amarga y rechazada ría(jajaja)(igual los quiero).